El mundo se encuentra en un continúo cambio, desde las prendas que vestimos hasta nuestros gustos y hobbies. Evolucionamos a todo lo ecológico, incluso llegando a una alimentación ecológica. Los coches contaminan muy poco y todo el mundo se ha vuelto más saludable. No sabemos si es sólo porque está de moda o porque esta nueva vida gusta más. Ir al supermercado ya no es un suplicio porque los productos alimenticios cada vez son más variados y los intolerantes encuentran su hueco para sentarse a la mesa, sin ser los raros del grupo. Si se prepara una ensaladilla, se podrá comer porque la mayonesa sin lactosa es la elegida. Además, con esta vida más fit, las personas se preocupan mucho por su físico y eligen productos sin azúcares como la mayonesa sin azúcares. Sentarse a la mesa ya no será un caos y todos querrán compartir los alimentos que más les gustan.